un poco de esto, un poco de aquello
Soy lo suficientemente mayor para ser la madre de Harry Styles... bueno no, de hecho solo soy más grande que él por dos años. Pero ese no es el punto de esta entrada que vengo escribiendo en mi cabeza desde hace como una semana. Yo quiero mucho a Harry Styles, se sabe, no me he cansado de repetirlo. Y no lo quiero en una forma en que despierte mis pulsiones sexuales, no. Lo quiero porque me inspira ternura. Lo que pocos, si no es que ningún hombre, me ha hecho sentir alguna vez. Si lo conociera, lo único que quisiera es darle un abrazo. Pero ese tampoco era el punto de esta entrada, me sentía contrariada cada vez que le digo a alguien que HS es mi artista favorito. Porque ciertamente lo es, pero me sentía juzgada. Como si el background de HS de estar en una boyband fuera algo que criticar o hasta algo vergonzoso. Hasta que cavé un poquito más profundo y descubrí que ese juicio lo hacía yo misma, desde mi propia misoginia interiorizada. Pero también desde una cuestión que es merame...